martes, 27 de julio de 2010

El por qué de las diferencias generacionales

Mi hijo tiene sólo 17 meses y ya mme veo capacitada para escribir sobre este tema. Patético, ¿no? A ver, la maternidad es una experiencia enriquecedora que no "atonta" a la mujer, como se dice (leed Ellison, Katherine, Inteligencia maternal, he puesto un enlace en el menú), pero es cierto que nuestras capacidades intelectuales cambian completamente de objetivos.

Me he vuelto una esponja a la hora de leer libros o asimilar ideas relacionadas con la maternidad, sueño infantil y demás pero el resto del mundo ha pasado a segundo plano tanto para mí como para Jordi. Desde noviembre del 2008 que no volvemos al cine, no es una queja. Es así, tenemos con quien dejar al crio pero tampoco tenemos la necesidad imperiosa de ir. Pues bien, hace poco me he enterado que hasta ir al cine ha evolucionado desde que no vamos. Ahora hacen falta unas gafitas 3D. Estamos mirando de comprar un lector de DVD pero no sabemos si comprarlo con lector de blueray. Me siento como esas abuelitas a las que sus nietos les explican como funciona el móvil. Por que Miquelet ya maneja el ratón del ordenador, por que el otro día me programó el aire acondicionado para que se apagara en tres horas y yo aun no me he parado a leer como se hace eso.

Así que estamos en el origen del problema que aparecerá dentro de 15 años, cuando Miquel me llame "antigua". O quizá aun tenga solución, no sé. Ahora intento combinar lo mejor que puedo mi faceta de madre con la de escritora ¡Visitad mi nueva página en Facebook! Por que estoy repasando la segunda prueba de imprenta de mi libro. Allí intentaré colgar temas que me parecen interesantes sobre maternidad pero que no tendrían cabida en este blog.