lunes, 18 de julio de 2011

Verano de aprendizaje

Julio ha empezado con las fiestas de la ciudad y con piscina. Tres días de fiesta con conciertos, actividades infantiles, cochecitos… Miquel se ha montado en todos los carruseles que ha encontrado y si el coche tenía campana para tocar era su elegido. El último día se atrevió con las sillitas exteriores del tiovivo. A pesar de la cara de susto de la primera vuelta, después reía como el que más. Todo esto ha supuesto que hemos estado en la calle hasta muy tarde y mi plan de “en la calle no hay teta” era inviable en esas condiciones ya que al ir yo con la silla no llevábamos carrito de niño y acababa encima de mí cuando se cansaba de andar o de ir a caballito de su padre y, en ocasiones, tenía hambre. Hemos montado varias veces en autobús, a Miquel le encanta este transporte. Ahora que las rampas son manuales, no supone ningún estrés subir al autobús. Evidentemente, dentro del autobús va encima de mí atado en el portabebé y mi silla está bien bloqueada.
Ya hemos ido a la piscina tres o cuatro veces pero lo sorprendente es que el segundo día ya Miquel se ha lanzado a nadar solito con los manguitos y ya no quería ni que lo sostuviera su padre “¡quita, quita!”. El último día hasta me remolcaba a mí tirando del churrito… Y es que este niño aprende todo con mucha rapidez, a excepción de ir al wáter. Detesta que lo pongamos allí y yo no puedo hacerlo sin su colaboración. Este verano nos quedamos en casita, espero que esto facilite el aprendizaje. No sé, a veces me siento perdida entre tantas cosas pendientes: queremos que Miquel aprenda a dormirse en su cuna y no en brazos, dejar el pecho, que vaya al wáter, que se porte siempre bien en el parque con los niños… Y es que ser madre no es nada fácil: los valores y la educación de una personita dependen de ti y a veces no sabes cómo hacerle llegar el mensaje. Miquel es bueno, todos los niños lo son, solo hay que estar muy pendientes de marcarle los límites en el momento adecuado y con la firmeza adecuada. La justa para que entienda que es importante lo que le estás diciendo y que lo asimile como algo natural y divertido (ir al wáter, compartir juguetes…). Algo bastante complicado.