jueves, 5 de enero de 2012

¡Feliz 2012!

Otro año más que empieza y otro año más, constipados hasta las trancas ¡es que no falla! Pero bueno, estas Navidades han pasado casi desapercibidas por caer en fin de semana pero Miquelet tuvo su Caga Tió en condiciones en casa de mis padres, donde pasamos la Noche Buena. La Noche Vieja la pasamos en nuestra casa donde Miquel nos dió un concierto con su batería nueva (si, si, y eso que la carta a los reyes no la escribe el niño todavía). También recibió un tren y ya veremos lo que cae  en esta noche mágica de Reyes...

Miquel está precioso y habla como una cotorra. Ahora mismo hace su siesta de la que me costará mucho despertarle, como siempre pero debemos ir a ver la cabalgata. Nunca quiere dormir y por la noche hemos cambiado de táctica. Su padre siempre se quedaba con él hasta que se dormía pero ya no. Le cuenta un cuento, le da un besito y le pone un proyector con música que le encanta. Generalmente, se queda quieto mirando el proyector y cuando acaba (a los 10 minutos) llama "¡mama, els estels!" para que se lo volvamos a poner. Así unas cuantas veces. No tengo muy claro que sea un progreso, pero es que la idea es que aprenda a coger el sueño "solo". Por que siempre que llama se le contesta, siempre estamos ahí al lado pero no en su habitación. Nunca se ha puesto a llorar, simplemente llama con más o menos insistencia y hasta nos hace reir con sus frases convinceentes "¡Princesaaaaaa!" "¡mami, tú puedes!"
El lunes empieza la guardería y creo que me costará más a mí que a él  coger el ritmo por que lleva dos días despertándome a las siete "¡mamá, ven!" y yo soy la que se da media vuelta y suplica cinco muntos más... La semana que viene me vengaré.

Ahora estoy iniciando el proceso de edición de Diario de una mamá canguro y replanteandome el futuro de este blog.  Estoy muy agradecida a esta plataforma que me ha ayudado a expresarme y quiero que siga viva pero, como ya comenté, me empiezo a sentir  un poco bouyer de mi hijo y no lo encuentro justo.Ser madre engloba muchas cosas y quizás empiece a hablar de mi día a día como madre con un enfoque diferente. Hay muchos pequeños detalles en mi vida cotidiana que creo que si los comparto puedo ayudar a otras personaas en situaciones parecidas.