lunes, 26 de enero de 2009

Semana complicada

El viernes me dí cuenta de una cosa: desde que hablé con el ginecólogo privado las contracciones esporádicas han desaparecido por completo. El miércoles, en la clase de preparación al parto, les pregunté a las matronas si en mi caso habría una atención especial o algo asi. Me dijeron que no, que todo normal. Si quería ir antes de tener contracciones cada 5 minutos era decisión mía. Me he dado cuenta de que hasta ahora estaba "poseida" por el flower power que difunden en el cursillo y no le veía las orejas al lobo. Dijeron algo importante: para ponerse de parto es necesario desearlo. No desear tener a tu hijo si no desear empujar, dar a luz.... Y a mí se me han esfumado esos deseos de golpe.

Sé que la cosa no es grave ni mucho menos. Este lunes empiezo la semana 37, aun tengo tres semanas para volver a cambiar el chip y desear parir y si no lo consigo la naturaleza hará su tarea y se iniciará el parto algún día, no?

No tengo mucha fé en esto, pero este miércoles que viene espero encontrar entre el ginecólogo, el anestesista o en la ultima clase de preparación alguna idea, un apoyo, una opinión que me ayude a volver a creer que todo va a ir bien. No quiero preocupaciones y me vienen justo ahora. Pero no pasa nada por que separen las contracciones, aun me quedan 3 semanitas. Aunque la impaciencia nos puede. Hoy para retomar el buen karma me he ido a comprar las compresas postparto, el alcohol de 70º grados y las gasas para el ombligo. Iba sola y le he metido a Miquel una charla para que sepa que todo va bien, que no importa cómo salga si no que tiene que salir dentro de 20 días o un poquito antes, si quiere. Y para hacer eso, hay que aceptar como buenamente podamos las contracciones de ensayo. Todo va a ir bien por que él está bien colocado y si hubiera que recurrir a la cesárea, pues ya se verá ¡Menos mal que no había nadie en la calle, que si no me toman por loca!

En estos días también he tenido la entrevista con la asistenta social por el tema de la ley de dependencia (gran engaño donde los haya) y aunque la mujer no pretendia cuestionar mi derecho a ser madre se pasó un cuarto de hora haciéndolo. Nadie debe pasar un exámen para ser madre ¿por qué yo si? Soy la primera interesada en que este niño tenga de lo bueno lo mejor en todos los sentidos y nos ocuparemos de ello. Soy consciente de que lo tengo mas díficil para cuidar de un bebé y hacer ciertas tareas (como cada cosa que he hecho en mi vida) pero para eso puedo encontrar ayuda. Y para lo mas importante: darle amor y educación, me basto yo solita (Qué no estaré sola, ni mucho menos).

A pesar de todas estas preocupaciones, parece que Miquel está muy a gusto dando botes aqui dentro y no tiene prisa por salir aunque ya nos muramos de impaciencia. Las contracciones han vuelto pero muy suaves y muuuuuuuy esporádicas ¡Sólo me quedan 20 días!!!!!!!!. A ver que me dice el miércoles el ginecólogo y el anestesista.

1 comentario:

Teuladí dijo...

Nadie tiene derecho a recriminar y meter dudas en el cuerpo de nadie, mucho menos una persona cuya función pública es la de ayudar, así pues no tienes que dar crédito a personas que no lo merecen. Se conoce que no tiene mucha profesionalidad, la pobre.
Pero bueno, tu a lo tuyo que es lo que desde que te decidistes por la maternidad estás haciendo, chica.
Claro que todo va bien, bueno, eso es lo que al menos espero y deseo, pues hasta ahora todo marcha dentro de la lógica. Miguel está decididamente a ver la luz, solo que ahora mismo y con el tiempo que hace aquí afuera, pues el chico muy inteligentemente se lo está pensando y tu que lo percibes, has levantado el acelerador para esperar mejor climatología para el nano.
Di que sí y no tengáis prisa, pues todavía haya tiempo.
Y tu animate que lo que vas a protagonizar es, nada más y nada menos, que parir una preciosa criatura que en un tiempo comenzará a balbucear mammá... y entonces se te olvidarána todas las incognitas pretéritas.