martes, 1 de septiembre de 2015

El deseo de ser tener un hijo

Todo empieza por ahí, todo empieza por un profundo deseo de amar, parece que nada que nazca del amor pueda ser un error. Te nace de las entrañas y no se puede parar. Deseas engendrar un hijo junto a tu pareja, deseas ver un fruto de ese a.mor y, a su vez, amar a ese fruto toda tu vida.Verlo crecer, sentir sus risas, enseñarle este mundo con sus cosas buenas y malas  Eso es el deseo de ser madre. Nace como unas pequeñas brasas y si las circunstancias favorables las avivan, el incendio es imparable... El deseo ya está gravado en tu mente y en tu alma.

El párrafo anterior lo puede escribir cualquier persona, hombre o mujer, que sienta el deseo de engendrar un hijo. Es indiferente su condición social, su etnia o su diversidad funcional. Es algo que viene de lo más profundo del ser humano. El deseo de tener un hijo es legítimo en cualquier circunstancia y debe ser respetado y valorado. 

Una vez aclarado esto, el deseo que escapa a nuestro control, podemos valorar infinidad de variantes a la hora de decidir cumplir el deseo de procrear. Lamentablemente, el factor económico suele ser decisivo y vernos capacitados para cuidar de un bebé, de un niño, de un adolescente.... Bueno, creo que pocos futuros padres se plantean la adolescencia de sus hijos (afortunadamente). "Verse capacitado" para una persona con diversidad funcional es realmente lo complicado. Generalmente, cuando una persona adquiere una discapacidad su entorno la protege con los mejores deseos pero, quizás, anulando sus voluntades mas íntimas. Es necesario tener una fuerte convicción para verbalizar el deseo de tener un hijo incluso en los círculos más íntimos. Sentirse apoyada en esta decisión es algo primordial.

Hay mucho de que hablar en este tema, ya que para hablar abiertamente con tu entorno de la posibilidad de tener un hijo, la persona con diversidad funcional debe haber abordado con naturalidad otros asuntos como su sexualidad, su derecho a buscar pareja... y aunque parezca algo tan obvio, lamentablemente aun hay muchos tabúes al respecto. Pero aquí me tenéis para hablar de ello. Este blog empezó contando el gran milagro de la vida. Ahora retrocedamos un poco más para tomar perspectiva e intentar abrir mentes y caminos hacía la libertad individual


1 comentario:

Esther dijo...

Hola, me ha llenado mucho leerte, pues me encuentro en ese momento que describes.Cuento con el apoyo de mi pareja, pero hay momentos en que los miedos y las dudas son todo un mundo y me gustaría compartirlos con alguien con diversidad como es mi caso. Lo primero de todo gracias y enhorabuena por este blog